Uno de los mayores placeres de tener una vivienda en Ibiza es la posibilidad de salir fácilmente a descubrir las islas vecinas. Ya sea desde Marina Botafoch o desde una tranquila cala del sur, las aguas que rodean el archipiélago balear ofrecen experiencias únicas, muchas veces a solo unos minutos en barco.
Desde reservas naturales hasta exclusivos beach clubs, cada destino tiene su encanto particular. Para quienes residen en la isla o están considerando invertir en una propiedad en Ibiza, este estilo de vida náutico suma un valor diferencial a la experiencia de vivir en uno de los lugares más deseados de Europa.
Formentera: lujo descalzo a solo 30 minutos
Formentera está a tan solo media hora en ferry o barco privado desde Ibiza y representa una versión más relajada y auténtica del estilo de vida balear. Sus playas, como Ses Illetes, son consideradas de las mejores de Europa y suelen encabezar rankings internacionales.
El ambiente tranquilo, sin aeropuerto y con estrictas regulaciones urbanísticas, ha preservado su carácter virgen. Es ideal para pasar el día entre almuerzos en Beso Beach o Juan y Andrea, paseos en bici entre pinares y puestas de sol en el faro de Cap de Barbaria.
Es Vedrà: un icono místico del Mediterráneo
Frente a la costa suroeste de Ibiza se alza Es Vedrà, una isla rocosa sin habitar, cargada de leyendas y magnetismo. No se puede pisar, pero es fácil reservar una excursión en barco para rodearla, especialmente al atardecer, cuando el sol baña la roca con tonos dorados y la atmósfera se vuelve mágica. Es una escapada corta e inolvidable, ideal para disfrutar con amigos o invitados.
Tagomago: exclusivo y en calma
Situada a solo un kilómetro de la costa noreste de Ibiza, Tagomago es una isla privada muy frecuentada por yates de lujo y embarcaciones de día. Aunque no se permite el acceso a tierra firme, sus aguas están abiertas al público, ideales para nadar o hacer snorkel en calas tranquilas.
Muchos residentes salen desde Santa Eulalia, paran para nadar en los alrededores de Tagomago, almuerzan en el encantador pueblo pesquero de Pou des Lleó y regresan navegando por la costa, disfrutando de uno de los paisajes más vírgenes de la isla.
Vivir en Ibiza: donde el estilo de vida se une con la libertad
Ser propietario en Ibiza no es solo tener una vivienda: es acceder a un estilo de vida en el que el mar, la naturaleza y la libertad están siempre al alcance. Poder disfrutar de escapadas a Formentera, Es Vedrà o Tagomago desde tu propio hogar aporta un valor añadido difícil de encontrar en otro lugar del Mediterráneo.
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